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CONOCIENDO LA DOCTRINA BÍBLICA

FUTURO DEL CRISTIANO

b) La Segunda Venida de Cristo:

Hemos visto lo que sucedía en el Cielo, ahora veamos que sucede en la esfera terrenal.

EL ANTICRISTO (Su manifestación)

Este personaje, el cual encarna a Satanás mismo, es llamado también la Bestia, y el hombre de pecado.

       Los pasajes donde se habla más de él, son: (2ª Tesalonicenses 2:3-12) (Apocalipsis capítulo 13). Si bien hay varios versículos diseminados a lo largo de la Escritura que hablan de él, y que son muy interesantes, sobre todo en el libro de Daniel.

Veamos el proceso de su aparición de forma figurada, con la apertura de los sellos del capítulo 6 de Apocalipsis.

Cada sello que se abre es un paso más que se da hasta que el libro es abierto, y los juicios de Dios son derramados sobre la tierra, con la apertura de séptimo sello:

Primer sello (Apocalipsis 6:1-2)

“Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira. Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo, y para vencer”.

Aparece uno que sale para vencer (que no hay que confundirlo con el jinete que aparece en el capítulo 19, que allí se refiere al Señor). Aquí, en el capítulo 6, el personaje es el Anticristo, en su manifestación y en su reinado de los primeros tres años y medios.

Segundo sello (Apocalipsis 6:3-4)

“Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente, que decía: Ven y mira. Y salió otro caballo, bermejo; y al que lo montaba le fue dado poder de quitar de la tierra la paz, y que se matasen unos a otros; y se le dio una gran espada”.

Hace referencia a los tres años y medio siguientes, cuando ya se quitará la máscara que llevaba puesta, y empezará a ponerse de manifiesto su maldad, y así aparece la guerra.

Tercer sello (Apocalipsis 6:5-6)

“Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente, que decía: Ven y mira. Y miré, y he aquí un caballo negro; y el que lo montaba tenía una balanza en la mano. Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: Dos libras de trigo por un denario, y seis libras de cebada por un denario; pero no dañes el aceite ni el vino”.

Como consecuencia de la guerra viene el hambre, quedando ilustrado aquí con el precio tan escandaloso del trigo y la cebada.

Cuarto sello (Apocalipsis 6:7-8)

“Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente, que decía: Ven y mira. Miré, y he aquí un caballo amarillo, y el que lo montaba tenía por nombre Muerte, y el Hades le seguía; y le fue dada potestad sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad, y con las fieras de la tierra”.

A la guerra le seguirá el hambre, y al hambre la muerte. Habrá mortandad.

Quinto sello (Apocalipsis 6:9-11)

“Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra? Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos”.

Como si fuera un paréntesis, observamos en el Cielo, a los mártires de la Gran Tribulación, que han sido muertos por seguir fieles a Dios, y sin adorar al Anticristo (El número de ellos no se había aún completado).

Sexto sello (Apocalipsis 6:12-17)

“Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto; y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre; y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento. Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se removió de su lugar. Y los reyes de la tierra, y los grandes, los ricos, los capitanes, los poderosos, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes; y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero; porque el gran día de su ira ha llegado; ¿y quién podrá sostenerse en pie?”.

Un aviso solemne de parte de Dios a los moradores de la tierra. Los juicios de Dios van a ser duros.

Los hombres, aun los más valientes, tiemblan, y pretenden esconderse del día de la ira del Cordero, pero no podrán.

EL ANTICRISTO (Su carácter)

(2ª Tesalonicense 2:4a)

Se opone a todo cuanto tiene que ver con Dios. Se cree autosuficiente, y hace la vida imposible a todo creyente.

(2ª Tesalonicense 2:4b)

Se hace pasar por Dios, se sienta en el templo y se hace adorar.

(2ª Tesalonicense 2:9-10)

Está lleno de todo engaño e iniquidad.

(Apocalipsis 13:11-17)

Junto con la otra bestia (el falso profeta) hace cosas terribles. Hace grandes señales. Hace matar a cualquiera que no adore a la imagen de la bestia.

Si alguno no tiene su marca, no podrá comprar ni vender. Será terrible...

(Daniel 7:25) (Apocalipsis 13:4-6)

Es el gran blasfemo contra Dios, y contra los santos.

EL ANTICRISTO (Su fin)

(2ª Tesalonicenses 2:8)

Será destruido con el resplandor de la Venida del Señor Jesucristo.

(Isaías 11:4).

(Daniel 7:26-27).

(Apocalipsis 19:19-20).

(Apocalipsis 20:10).

Será destruido y arruinado por el Señor, y lanzado al lago de fuego, pasando el reino y el dominio de las naciones a Aquél que es el Rey de reyes y Señor de señores.

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